Decíamos ayer que España siempre anda a la caza de su oportunidad de crecer y jugar, luchar y ganar. Lo hizo deslumbrando ante Inglaterra en el final de la Shebelieves Cup de Estados Unidos. Seis meses después, cuando de nuevo rueda la pelota y el mundo ha cambiado, las de Jorge Vilda siguen a lo suyo. Inasequibles a las dificultades, con el horizonte un poco más lejos, por eso del retraso del Europeo, pero igualmente ilusionado.

Lucía García mostró una camiseta de Virginia Torrecilla en la celebración del primer gol de España

Y así, la avalancha no se hizo esperar. En media hora se había puesto con tres goles el equipo de Vilda, con la nota común de ser generados por la derecha, banda más cómoda en la primera parte. España llegaba hasta la línea de fondo con Marta Corredera y Alba Redondo. La del Levante dio el primero y el tercero, que anotaron Lucía García y Mariona Caldentey. El segundo lo dio la madridista, y remataron a gol entre Alexia Putellas y las defensoras locales.

El ritmo no decayó, tras los tres primeros goles, ante una Moldavia que apenas podía salir de su terreno propio. En el segundo tramo de la primera mitad, el partido volcó a la izquierda y llegaron el quinto y el sexto, con Leila Ouahabi como asistente y Alba Redondo y Lucía García firmando goles.

Tras el descanso, España buscó el séptimo, y lo encontró por medio de Mariona Caldentey. La circulación de balón de banda a banda era rápida y así aparecían los huecos para el remate. Encarando el tramo final, llegó el octavo, obra de Patricia Guijarro tras un tiro al palo dee Aitana Bonmatí.

El noveno, ya con varios cambios en el once de Vilda, que dio entrada a Marta Cardona, Aitana Bonmatí e Irene Guerrero, llegó desde los once metros. Fue obra de Mariona Caldentey, que firmaba el tercero de su cuenta particular.

España vuelve al fútbol con una lección de poderío en su lucha por estar en el próximo Campeonato de Europa, que será en Inglaterra en 2022.