Margalida Pujol Visconti nació un 12 de abril de 1925. Este año cumplirá 96 años y la suya es una historia de amor por los colores del RCD Mallorca. Su primer contacto con el club se remontan a los primeros años del Fortí, llamado años más tarde Luis Sitjar. En aquel momento, ver una mujer en una grada de un campo de fútbol no era nada habitual. Pero Margalida había nacido para ser diferente. «Me acuerdo de un día que jugábamos contra el Cartagena y que solo había una mujer en toda la tribuna. No había otra. Éramos dos y antes de acabar la primera parte me dijo de ir a tomar un café porque hacía frío. Antes de que fueran los hombres a tomar un café. “¿Quieres que vayamos?”. Pues “vamos, vamos” le dije.  Solo éramos dos mujeres en todo esa zona. Las mujeres se han ido incorporando al fútbol».

Margalida se licenció en magisterio y dedicó su vida profesional a proyectos sociales. Los libros y el fútbol eran sus dos grandes pasiones. Todavía recuerda con emoción la celebración en el puerto de Palma por el primer ascenso a Primera. Ella fue uno de los miles aficionados que esperaron en el puerto la llegada de los héroes de Vallejo. «Vinieron con el barco y fuimos a esperarlos. Recuerdo mucha emoción. Lo recuerdo perfectamente».

Margalida Visconti, socia nº 344 del RCD Mallorca, se emociona al pensar que el mundo ha evolucionado y que la mujer tiene cada vez un papel más importante, también en el mundo del fútbol. «Antes había mucha diferencia entre un hombre y una mujer. Ahora todo esto se ha ido reduciendo. Ahora ya tienen lo mismo. Mismos gustos… ha habido un cambio muy grande». Y para terminar nos deja un deseo: seguir siendo socia del club muchos años más. «He aguantado todos estos años. No he querido perder nunca el contacto, a pesar de no haber podido ir, he querido ser socia. No he querido perder nunca el carnet de socia del Mallorca».

Gràcies Margalida!

RCDM