El CD Menorca es uno de los clubs de la Isla que han optado por no alterar su actividad a pesar de las restricciones impuestas por el Govern a los deportes de equipo y de contacto para desarrollar sus entrenamientos como medidas de prevención ante la covid-19, y que esta semana ha sido ampliado en un plazo de otros quince días.

Desde la entidad que preside Miguel Ángel Sintes, en lugar de detener su pretemporada se ha preferido adaptar su programa de preparación a la normativa y protocolos de seguridad promovidos desde la conselleria de Salud del Govern. Y por el momento, ya son nueve los equipos del club que se ejercitan –desde hace algunas fechas– sobre el césped del Estadi Maonès (además del equipo de Regional, los tres de categoría juvenil, dos conjuntos cadetes y tres de infantil).

«Hemos hablado con los padres de todos los jugadores, con reuniones personalizadas con cada uno para explicar al detalle lo que se puede y debe hacer, y la gente está contenta, entrenamos con las máximas medidas de seguridad, los chicos vuelven a hacer deporte y a disfrutar del fútbol», analiza Marcial Pérez, director de cantera menorquinista y uno de los responsables del ‘dispositivo’ de seguridad anti-coronavirus que se ha auspiciado en el hogar azulgrana.