Carlos Montes de Oca / Miquel Alzamora

La nueva propiedad del Real Mallorca, cuyo cabeza más visible es Llorenç Serra Ferrer, confía en que la secretaría técnica al completo ponga sus cargos a disposición de los que serán nuevos accionistas del club balear. Es una evidencia que en el plan del técnico pobler no entra ninguno de los rostros que estos últimos años han sido los cabezas visibles tanto de la dirección deportiva como del grupo de técnicos del primer equipo.

Por este orden, Serra espera que Nando Pons y Marcos Martín den el primer paso. Navarrete termina contrato y no es un problema, mientras que con la marcha de Manzano se desmembra también el que ha sido su grupo de colaboradores, es decir, Gonzalo Hurtado, Toni Servera, Joan Mesquida y Damià Amer.

Regeneración

Serra cree que es imprescindible regenerar el equipo, tanto a nivel de plantilla por el elevado coste de la misma, como del cuerpo técnico y dirección deportiva. Sin embargo, no será una misión fácil. Semanas atrás, el actual consejero delegado y propietario, Mateu Alemany, independientemente de que se vendiera el club o no, comunicó al delegado Damià Amer y al director deportivo, Nando Pons, de la necesidad de ajustarse el cinturón y rebajarse los sueldos que perciben. Ni uno ni otro ha dado todavía respuesta alguna sobre esta cuestión y todo indica que se agarrarán con firmeza a sus contratos cuando se produzca el cambio de propiedad. En este caso ambos casos se inluirán al Expediente de Regulación de Empleo (ERE) que llevará a cabo el club.

Son Bibiloni

La idea de Serra es empezar a trabajar en todas las áreas deportivas del club desde el primer día en que ya ejerza de mánager general, situación que puede producirse mañana, y desde el primer minuto quiere tener las manos libres para administrar Son Bibiloni como él estime oportuno, sin tener que dar explicaciones a Pons, Marcos y Navarrete y en definitiva a nadie que se identifique con el antiguo régimen.

Además, el factor tiempo es un hecho que ya juega en contra del entrenador pobler, acostumbrado a planificar con mucha más antelación todos sus proyectos. Ahora deberá poner la quinta marcha.

Ausencias

Entre o no Serra en el Mallorca, hasta cinco jugadores han recibido ya la orden por parte del club balear de que se busquen equipo. Corrales, Varela, Lux, Bruno China y Óscar Díaz no están citados en Son Bibiloni el próximo día cinco de julio, cuando la plantilla debe iniciar las analíticas y pruebas médicas y prácticamente el resto de la plantilla está en el mercado, aunque principalmente Aduriz, Ramis, Webó y Keita son los que con más probabilidad dejarán el club. Interesa la continuidad de Aouate, Nunes y Castro, pero las circunstancias pueden cambiar a lo largo del verano.

Comparecencia

Desde que el pasado cuatro de junio Serra firmara la opción de compra con Mateu Alemany y que expira el miércoles 30, se ha seguido un ritmo frenético de negociaciones para tratar de dotar de músculo financiero al nuevo proyecto. Confirmado el concurso de acreedores, el guión va siguiendo su curso y la idea del entrenador pobler es comparecer mañana mismo junto a Mateu Alemany en rueda de prensa y explicar los pormenores del acuerdo y el proyecto de futuro. Mañana puede ser otro día histórico para el Real Mallorca, que puede volver a cambiar de manos.

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