Serra Ferrer, Cúper y Manzano, los técnicos rojillos que han disputado la final, creen que la historia «puede repetirse»

R. CABOT. PALMA. Los tres pueden presumir de muchas cosas, pero sólo ellos, en los 93 años de historia del Mallorca, de haber sido los únicos entrenadores que han dirigido al equipo en una final de la Copa del Rey. Son Llorenç Serra Ferrer (Sa Pobla, 1953); Héctor Cúper (Santa Fe, Argentina, 1955) y Gregorio Manzano (Bailén, Jaén, 1956). Sólo este último saboreó las mieles del triunfo, en la final disputada en Elche en 2003, cuando se impuso al Recreativo de Huelva por 3-0, con dos goles de Etoo y otro de Pandiani.
Tanto Serra Ferrer, Cúper y Manzano coinciden en un aspecto: la semifinal que el Mallorca disputará mañana miércoles ante el Barcelona, con el objetivo de remontar el 2-0 de la ida, «hay que disfrutarla». «Después puede salir mal, porque nos enfrentamos a un gran equipo», afirma el actual entrenador mallorquinista, «pero si no lo logramos nos quedará el consuelo de que ha sido ante uno de los mejores equipos del mundo».
Serra Ferrer, que suma una Copa del Rey en su palmarés, conquistada en su época de entrenador en el Betis, se acuerda como si fuera ayer de la semifinal que disputó el Mallorca contra el Sporting en 1991. «Tengo muy buen recuerdo», rememora para DIARIO de MALLORCA el también ex técnico del Barcelona y AEK de Atenas. «En El Molinón ganamos 0-1 y en la vuelta sufrimos pero al final Alvaro Cervera marcó el gol que nos metió definitivamente en la gran final. Fue una gran alegría para un club que nunca se había clasificado para una final de Copa».
El técnico mallorquín valora la clasificación del Mallorca para semifinales «porque llegar hasta aquí no es fácil. Hay que disfrutar el momento y después intentar pasar. Hay que respetar al Barça, pero el Mallorca se ha de creer que puede ganar. Ha recuperado el hábito ganador. El Mallorca parte con dos goles en contra, pero si marcamos un gol en la primera parte el partido será largo», señala el pobler.
Héctor Cúper fue protagonista de la final más dolorosa. En 1998 cayó en los penaltis ante el Barcelona tras acabar la prórroga con empate a un gol. «Tengo los mejores recuerdos de aquella final. La ganó el Mallorca, más allá de que la Copa se la llevara el Barcelona», comentaba ayer el actual seleccionador de Georgia en el programa Versió Reial.
Cúper, uno de los técnicos que mejor recuerdo ha dejado entre los aficionados mallorquinistas, cree que a favor del Mallorca está «el estímulo importante de los jugadores. En el fútbol nunca se puede decir que todo esté hecho. En la Copa hay todo tipo de sorpresas, y si el Barçá se relaja, más allá de su potencial, se puede llevar una sorpresa desagradable». Cúper, dos veces finalista de la Liga de Campeones con el Valencia, considera que, «por respeto a la Copa que ha ganado el Mallorca, hay que darle importancia al partido del miércoles. Sería lamentable que no se le diera. No todos los equipos llegan a las semifinales de una competición».
Por su parte, Manzano, hasta ahora protagonista del único título de Copa con el Mallorca, en 2003, valora los cuartos y las semifinales ante el Real Madrid y Deportivo. «Sufrimos mucho hasta el gol de Ibagaza, pero valió la pena porque la final de Copa es uno de los partidos más bonitos que se pueden disputar», señala el técnico a este diario. Para el técnico andaluz, el partido de mañana ante el Barcelona es «para disfrutar por la actual trayectoria en la Copa». En cuanto a las posibilidades, está convencido de que habrá eliminatoria «si somos capaces de marcar primero».

FUENTE DIARIO DE MALLORCA