En la segunda parte, el guion no cambió. Gallar de nuevo fue el principal arma ofensiva del cuadro pitiuso, que estuvo a punto de adelantarse en el minuto 52. Una buena acción de Soko, de lo mejor del partido, por la derecha acabó con el balón al área, donde Arroyo se la dejó de pecho a un Gallar que chutó al palo contrario. En la grada se cantaba gol, pero Herrero voló para realizar un paradón y mantener las tablas en el marcador.

La réplica la dio Dioni cinco minutos después. Tras un rebote, se quedó completamente solo contra Sequeira, que salió raudo y veloz a tapar el remate. Paradón.

El partido se animaba y el equipo unionista estaba más enchufado que en el periodo anterior. De hecho, mereció ponerse por delante en el 61 con un gol de Soko que fue invalidado por un más que discutible –por no decir inexistente– fuera de juego de Obolskii.

El fútbol hizo justicia poco después. Tras una buena jugada colectiva de los locales, Javi Jiménez le dejó la pelota a Gallar, que avanzó hacia la frontal del área y sacó un latigazo cruzado ante en el que no pudo hacer nada el guardameta malaguista. Can Misses explotaba de júbilo.

Acto seguido, Soko pudo poner la puntilla. Recibió el balón por la izquierda, pero, tras marcharse del portero, lanzó fuera en una posición bastante escorada. De la sentencia se pasó al empate en el minuto 72. El recién incorporado Haitam lanzó un obús desde fuera del área y clavó la pelota en la mismísima escuadra. Golazo.

Romo trató de refrescar su ataque con la entrada de Abde y Rubén Díez por Arroyo y Gallar. Quedaba poco tiempo y no se les pudo ver demasiado. De hecho, apenas hubo nada reseñable en la recta final. El marcador se mantuvo con el 1-1 hasta el final. De esta forma, la UD Ibiza enlazó su segundo partido consecutivo sin ganar en Can Misses y perdió la oportunidad de poner tierra de por medio con un rival directo por el ascenso.