Aitor Karanka, exjugador de Athletic de Bilbao y Real Madrid y más recientemente segundo entrenador del conjunto madridista en la etapa de Jose Mourinho, está pasando sus vacaciones en Eivissa a la espera de que se concrete su futuro profesional, que cada vez parece más lejos del club de Concha Espina.

El técnico, que afirma que estar al lado de Mourinho estos tres años ha sido “lo máximo” y que puede presumir de “ser su amigo”, no ha acompañado al portugués en su nueva etapa en el Chelsea, mientras que en el Real Madrid no tiene sitio en el cuerpo técnico. El problema, según algunos medios, es que Karanka quiere cumplir su contrato, que es hasta 2016, y que su despido le podría costar a Florentino alrededor de tres millones de euros.

El vasco, mientras tanto, sigue descansando en las Pitiüses después de una temporada “muy dura”. Karanka, para pasar el mal trago, tiene claro cuáles son sus vacaciones ideales. En la revista DT, en el número de julio y agosto, afirma que las vacaciones soñadas “son las que voy a tener. Me voy con mi mujer a un viaje de seis días, y después, como siempre, tres semanas con mis hijos a Eivissa. Siempre solemos hacer eso”.

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