Gesto de rebeldía en el Ibiza B mientras Borges decide dejar el Club.

Ibiza B
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Los jugadores del Eivissa B han decidido de forma unilateral reducir el número de entrenamientos semanales. Dos sesiones menos, las programadas para el miércoles y para el sábado. De hecho el pasado miércoles se presentaron dos jugadores de la plantilla deportivista en Can Misses. No hubo entrenamiento.

Los motivos son sobradamente conocidos por los seguidores de este blog. El impago sistemático de las mensualidades a los jugadores, se les adeudan cuatro meses, y el presidente Pedro Ortega ha faltado a la palabra empeñada con la plantilla a mitad de enero en que fijó del 1 al 8 de cada mes como días de cobro. Nunca se ha producido pago alguno. En algunas oportunidades los capitanes han reivindicado sus derechos económicos ante el gerente del club que ha solucionado la cita con el pertinente y repetido engaño.

El equipo juega el sábado en Can Misses a las 17 horas ante el Cala d’Or. La plantilla tiene decidido hacer un gesto de protesta durante el partido para que los aficionados, pocos desgraciadamente, que presencien el partido y los medios de comunicación se hagan eco del generalizado malestar. Una sentada de un minuto mientras se juega el partido, ocultar el escudo de la camiseta o portar una camiseta de color ditinto al habitual son algunas de las opciones contempladas dentro del vestuario.Alguno de los jugadores pidió la baja en el club, una lista que inició Marc Vales y que cierra, a fecha de hoy, Borges, que ha abandonado la plantilla. Por trágicos motivos familiares, Andreu ha viajado a Barcelona. No se conoce con certeza total que el jugador vaya a regresar a la plantilla deportivista.

Algunos esperan el inicio de la temporada turística para encontrar un trabajo que les dé el dinero que el Eivissa no les ha pagado, paga ni pagará ciertamente. El resto se quedaron por seguir jugando en Tercera División, pero tampoco están en disposición de sacrificarse más de lo imprescindible por un club que ni se ha preocupado por ellos antes ni lo hace de cara al futuro. Hasta ahora, Sergio Tortosa no se ha caracterizado por defender ante la directiva ni de forma pública a los jugadores que entrena y que hacen de él un buen o mal entrenador a tenor de los resultados. Tortosa comulga con la directiva que le colocó en el banquillo, es un estómago agradecido. Sus jugadores no creen ni confían en él. En declaraciones a la Cadena SER Ibiza dijo tener esperanza de que el equipo acabe la temporada. Ilustrativo.

El Eivissa está formando el equipo de la próxima temporada y para ello comienza trayendo de Italia a tres jugadores que entrenan en Can Misses y que llegan de la mano de Patrizio Rossi, el representante italiano que entró en el organigrama del Eivissa en enero y en el mercado invernal aportó cinco jugadores de prueba. No sirvió ninguno.

Como alternativa para fichar jugadores está la opción Janos Beke Bustos, el nuevo inversor del Eivissa dispone de jugadores para engrosar al equipo. Falta hará, porque los actuales jugadores del filial son plenamente conscientes de que el esfuerzo que están haciendo actualmente es baldío y que su equipo, por el efecto dominó que se avecina está condenado, en el mejor de los casos, al descenso y en el peor, no por trágico descabellado, a la desaparición.

FUENTE FUTBOL PITIUSO

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