Alineaciones:

C. Atlético Monzón: Marc Puigvert, Samou Kone, Carlos Valencia(Carlos Puente, 108′), Javier Claver, Enrique Rausell(Albert F- Simó, 83′), Youssef OuaKKati (Aritz Hernández, 114′), Daniel Arnedillo, Pablo Bernárdez(Enric Solano, 91), Fadiala Fofana, Mohamed Abouhafs(Ricard Ciruela, 68′) , Jorge Cofrade.

UE Porreres: José J. Rivas, Guillermo Romaguera(Alberto Castaño, 89′), Jaime Calonge, Miquel Algaba, Climent Noguera (Sergi Martín, 57′), Rodrigo P. Cuenca(Federico Lussenhoff, 90′), Alejandro Alvarez, Daniel Amengual, Luís S. Alomar (Pedro R González, 91′), Joan Sorell, Daniel Lópe(Gabriel Santos, 98′).

Goles: 0-1 Luís S. Alomar(59′).

Penaltis: 4-5

Árbitro: Cristián Selva Vicente asistido en bandas por Jaime Selva Vicente y Alberto López Toral. 4º árbitro  Mariano Esteban López.

Tarjetas: amarillas para los locales Enric(99′), Valencia(107′) y Puente(119′) y para los visitantes Climent(55′) y Sorell(106′)

Comentario:

Repitió el mismo once de la ida Ismael Mariani, mientras que su homólogo en el banquillo balear, Miquel Soler introdujo cinco piezas nuevas, además de una modificación en el esquema, metiendo tres centrales, quitando así la línea de cuatro defensores con la que salió en su campo. Se notó la tensión de lo mucho que había en juego. El Porreres salió a tratar de igualar la eliminatoria lo antes posible, buscando hacerse con la posesión, mientras que el Monzón pecó de un punto de precipitación y de falta de precisión en los pases en la faceta ofensiva.

Fue Youssef el que intentó abrir un partido muy parco en lo que a peligro se refiere. Llegó hasta la línea de fondo en una jugada que recordó a la que valió el 0-1 en Ses Forques, aunque esta vez buscó un pase atrás, que cortó providencialmente Calonge. Dos minutos más tarde, el mismo jugador rojiblanco se llevó con picardía y con ayuda del hombro la pelota, sin que el colegiado viese nada, llegó un poco justo al mano a mano ante Rivas, que le cerró bien los espacios para taponar una acción muy peligrosa.

Conectó Marc en un potente saque en largo con el incansable Youssef, que arrancó desde su campo. El control con el pecho se le fue más largo de la cuenta al marroquí, dejando escapar una ocasión de esas que últimamente no estaba perdonando. Con el marcador inicial, y con un mejor y más entonado tramo final montisonense, se llegó al descanso.

Faltaban 45 minutos para refrendar el trabajo de toda la temporada, y con esa intención salieron los locales, que engancharon un cuero al desmarque por la banda de Youssef, que vio la llegada de Bernárdez, que rodeado de tres contrarios, no llegó a concretar el remate. Volvieron a entenderse poco después estas dos piezas tan importantes del entramado mediocinqueño, pero otra vez el control, esta vez con el pie, se le volvió a ir lejos al delantero rojiblanco.

El emparejamiento entró en una nueva fase, con el condicionante de un calor sofocante e insufrible, que iba a marcar el rendimiento de los futbolistas. Tuvo el empate y medio billete de ascenso Youssef, al que su chut a bote pronto pegó en el muslo de un Rivas que salvó casi sin querer. No hubo tiempo para más y el partido se fue camino de una prórroga dramática.

El tiempo extra, con las energías bajo mínimos, dejó poco, si bien fue de nuevo el Monzón el que estuvo más cerca de acariciar el premio, en una mano salvadora de Rivas a Chipi y un último remate de Youssef, forzado, que mandó fuera. Los penaltis iban a decidir el conjunto que militaría en unos meses por primera vez en Segunda Federación. Ahí estuvo más inspirado el Porreres, después de alcanzar la muerte súbita. En el sexto disparo, Rivas detuvo el lanzamiento de Fofana y el mismo portero, con mucha diferencia el mejor de los suyos, convirtió el último para dejar completamente silenciado el Isidro Calderón, excepción hecha de los aficionados y jugadores insulares, que fueron quienes esta vez les tocó celebrar.

Redacción