Javier Zurbano: «En fútbol están muy atrasados»

Javier Zurbano, satisfecho por la experiencia vivida en Vietnam aunque no fructificara porque no le convencieron la organización de los dos clubes en los que estuvo ni los ruinosos estadios

Vietnam. Diferentes instantáneas de Zurbano durante su estancia en las ciudades de Tan Hoa y Long Xuyen donde probó con sus respectivos clubes de Primera y Segunda División

Javier Zurbano podrá reaparecer con su equipo, el Penya Ciutadella, el próximo domingo en Formentera tras haber vivido una experiencia extravagante en el fútbol del sudeste asiático, en Vietnam, en busca de un buen contrato que le permitiera mantener su condición de profesional, aparcada desde su regreso a Menorca.

Animado por su representante, el jugador navarro partió hacia la capital de aquél país, Hanoi, la última semana de octubre después de pasar por Barcelona y Singapur, acompañado por su hermano, y regresó a la isla el pasado domingo. Atrás quedaron veinte días repartidos con la estancia a prueba en dos clubes de dos ciudades distintas, Tang Hoa, en la costa central del norte del país, y Long Xuyen, capital de An Giang, en el delta del río Mekong.

“La experiencia ha sido muy buena porque he conocido un país muy distinto que me ha gustado bastante, pero en cuanto a fútbol están muy atrasados y su organización es cero; tenían que esperarnos en el aeropuerto los directivos del Tan Hoa cuando llegamos pero no apareció nadie y en cuanto llevamos unos días allí ya vimos que no era todo tan bueno como nos lo habían pintado”, explica Javier Zurbano a este diario.

En Tan Hoa probó en el equipo que lleva el nombre de la ciudad, una urbe con 3,5 millones de habitantes, que milita en la primera división la V-League Vietnamita. “Después de varios días allí me dijeron que les interesaba pero como no era de los jugadores que había propuesto el entrenador ese interés no pasó de ahí”, relata el ariete navarro quien destaca el contraste entre la amabilidad del ciudadano vietnamita con la dificultad de penetrar en su sociedad.

En Long Xuyen, Zurbano probó en el equipo de la ciudad, también de más de tres millones de habitantes, “y yo creía que las cosas iban bien pero al final me dijeron que no veían que mi adaptación al club, al fútbol de allí y a las costumbres del país fuese a ser buena”.

El delantero pamplonica de 32 años tuvo la opción de probar con un tercer equipo “pero decidí que ya había visto bastante; por ejemplo un día me decían que el entreno era a una hora y después resultaba que era o más tarde o más pronto; había poca seriedad y por eso decidí volver a España y dar por finalizada esta aventura en Vietnam”.

Zurbano viajó al Sudeste asiático en busca de un buen contrato considerando que los extranjeros cobran entre 5.000 y 7.000 dólares al mes, además de primas de 1.000 o 2.000 dólares por partido ganado. “Sí, eso es completamente cierto porque los futbolistas con los que pude hablar allí me dijeron lo que cobraban y lo hacían realmente. Era una buena oportunidad para mi pero no salió bien y ya está”.

A Zurbano le llamó la atención de forma negativa el estado de los campos de fútbol “porque estaban muy mal cuidados, prácticamente ruinosos y eso era desagradable para la vista; por eso quizás cuesta creer que los clubes puedan pagar esas cantidades a los extranjeros pero es cierto que es así”.

Durante su estancia en Tan Hoa y Long Xuyen, Zurbano, fue alojado en hoteles y residencias de los clubes “porque, eso sí, casi todos tienen residencias propias”. El coste de los billetes corrió de su propio bolsillo “aunque me han dicho los representantes que me lo van a abonar”.

A su regreso a la Isla el pasado domingo, Zurbano ha vuelto al Penya Ciutadella que no llegó a tramitar su baja porque en Vietnam se encuentran en pretemporada hasta el lunes. Aquí se halla a gusto aunque no descarta volver a hacer las maletas en el mercado de invierno “si aparece alguna propuesta interesante pero tal y como está el mundo es bastante complicado.

Javier Zurbano acumula ya una dilatada experiencia como futbolista profesional que le llevó, incluso, a una breve estancia en el Grashoppers suizo tras una gran campaña en la Peña Deportiva Santa Eulalia en el verano de 2008, donde había coincidido con el propio Dani Mori. Su mejor año, no obstante, lo vivió en Menorca, en las filas del CE Alaior, del que es su máximo goleador histórico en una temporada ya que anotó 23 goles en la campaña 2006-07. Posteriormente Zurbano siguió su carrera en el Santa Eulàlia, Móstoles, Llanos Aridane, La Roda y Coruxo FC, entre la Segunda División B y la Tercera.

Diario de Menorca

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