Mientras la mayoría de futbolistas y cuerpo técnico disfrutan de unos días de descanso una vez ha terminado la Liga, los lesionados no pierden ni un día para acelerar sus recuperaciones. En la Ciutat Esportiva Antonio Asensio disponen de unas grandes instalaciones con mejores profesionales que les ayudan en su día a día para poder volver formar parte cuanto antes del equipo que dirige Caparrós.

Sobre las 09:30 horas van llegando los lesionados. Aouate, Nunes, Kevin, Nsue, Ogunjimi, Álvaro y Uche del filial. Cada uno tiene un trabajo por hacer ya sea de gimnasio, tratamiento con los fisioterapeutas o correr en solitario. Junto a ellos trabaja un equipo de profesionales que velan por que todos tengan cubiertas sus necesidades.

Las bromas no faltan nunca en este vestuario. Aunque no están en las mejores condiciones, el ambiente entre compañeros es inmejorable.

Los fisioterapeutas Vicenç Marí, Vero Sebastianes o incluso Tomeu Llabrés que habitualmente está con el filial y echa una mano al primer equipo cuando se le necesita, trabajan a diario con estos futbolistas. Asimismo Martí Ferragut, recuperador y preparador físico se encarga de distribuir el trabajo físico tanto dentro de las instalaciones interiores como sobre el césped.

Aunque no esté todo el grupo, los utilleros del equipo Luis Martín y José León también se encargan de tener cubiertas las necesidades de éstos que necesitan intensificar su trabajo incluso en los días libres de sus compañeros.

Las instalaciones de la Ciudad Esportiva permiten un gran abanico de posibilidades para que los futbolistas puedan recuperarse en las mejores condiciones. Nunes recibía tratamiento y luego pasaba a la cinta para realizar ejercicio aeróbico. Mientras, Nsue o Uche hacían varios ejercicios también en el gimnasio. Sobre las camillas, Vicenç Marí se encargaba de dar su tratamiento en el tobillo a Ogunjimi y Vero trataba a Dudu de la lesión fibrilar en el gemelo.

Kevin junto a Martí comenzaba el día corriendo sobre el césped para terminar más tarde con unos estiramientos y el tratamiento de Marí. Aunque con algo de dolor, el defensa va mejorando poco a poco. Álvaro dedicaba parte de la mañana a estar en el gimnasio y trabajar brazos y piernas, mientras su pie sigue inmovilizado.

Su rutina de trabajo será la misma a partir del jueves, cuando regresan sus compañeros pero ya les faltará un día menos para poder estar con el grupo.

¡Ánimo a todos!

RCDM