El Sporting Mahonés deberá abonar alrededor de 70 mil euros a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) o presentar garantías de pago antes del viernes a las 12.00 horas si quiere jugar el domingo ante el Gandía.

El club adeuda la totalidad de los desplazamientos de la pasada temporada y gran parte de la anterior, por lo que Madrid ha bloqueado la tramitación de fichas de todos los equipos de la entidad. El Sporting tiene dos días para liquidar ese pasivo o no podrá estrenarse en el Guillermo Olagüe.

La RFEF reclama al club de Bintaufa cerca de 30 mil euros correspondientes al ejercicio 2009/10 y 50 mil de la temporada 10/11 en concepto de viajes, cuyo importe costea en un 50% la federación. La balear adelantó el primer pago en agosto del 2010 ante las dificultades del Sporting Mahonés para reunir ese capital y, según fuentes de la Federació de Futbol de les Illes Balears (FFIB), se pactó un plan de devolución que se ha incumplido.

Más deuda

Al margen de lo que el Sporting le adeuda a la FFIB conveniente al curso 09/10, el principal problema reside ahora en que la obligación de la campaña 10/11 es con la RFEF, inflexible ante los impagos. La Junta Insular de Menorca y la Federació Balear han recibido órdenes de no movilizar ninguna ficha hasta que no se abone el dinero o se tenga una garantía de pago.

Sporting Mahonés y FFIB se mostraban ayer conciliadores y confiaban en cerrar un trato que permita que el equipo de Elcacho pueda jugar en Gandía, pero desde Palma advertían que el tiempo juega en contra de los intereses del club de Maó. Y es que el viernes acaba el plazo. Todo está pendiente de una reunión (o charla) entre Paco Segarra y Miquel Bestard, cuya relación se ha ido deteriorando a lo largo de los últimos meses.

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