La Real Federación Española de Fútbol (RFEF) ha comunicado de forma oficial al Sporting Mahonés que ha sido denunciado por la mayoría de jugadores de la primera plantilla ante la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE) -algo que ya sabía-, por el impago de las últimas cuatro mensualidades de la temporada 2010/11. Concretamente se han recogido diecisiete denuncias valoradas en 143.000 euros que el club deberá liquidar antes del próximo 30 de junio sino quiere perder la categoría. La Comisión Mixta de Segunda División B deberá estudiar ahora las reclamaciones presentadas por los jugadores, a lo que la entidad blanquiazul puede presentar las alegaciones que crea convenientes.

La notificación no ha pillado por sorpresa a los responsables de la nave blanquiazul, ya que el presidente, Paco Segarra, siempre que se ha reunido con los jugadores para explicarles la situación económica y los plazos previstos para abonar las mensualidades pendientes, ha promovido que, en caso de considerarlo oportuno, denunciasen al Sporting.

Este déficit con la plantilla se une a las cantidades que el club debe resolver con la RFEF en concepto de los desplazamientos correspondientes a la pasada temporada -unos 50.000 euros- y la recién finalizada -una cantidad parecida a falta de confirmación-. En caso contrario, el club no podría tramitar las fichas de ningún equipo la próxima temporada.

Un millón de presupuesto

En total, una deuda que rondaría los 250.000 euros, y que el club hizo pública ayer a través de un comunicado oficial en un ejercicio de transparencia de cara a los socios y al buen funcionamiento de la institución. Esta suma que resta por cubrir de un presupuesto estipulado en un millón de euros para el ejercicio que está finalizando, no se debe, según ha informado el club, a una mala planificación sino a una falta de creación de fuentes de ingresos con las que se contaba al inicio de la campaña, en referencia al uso de las nuevas instalaciones deportivas y su explotación, bien a través de los locales que incluirán o bien a través de los campos de fútbol para torneos o concentraciones de equipos del norte de Europa, una iniciativa en la que piensa volcarse el equipo directivo que preside Paco Segarra.

Pérdida de abonados

La delicada situación económica que atraviesan no sólo las instituciones deportivas sino todos los estamentos de cualquier ámbito en general, ha provocado también descensos notables en los ingresos previstos esta temporada en concepto de explotación de soportes y espacios publicitarios y en las cuotas de abonados. En este sentido, el club ha perdido entre un 40 o 50 por ciento de socios, pasando de unos 850 a unos 450, cuando la temporada del ascenso (2008/09) eran 263 y la pasada, la primera tras volver a 2a B (2009/10), 808.

Por último, el club hace un llamamiento para la mayor concienciación e implicación de todos los sectores, tanto sociales como institucionales para asegurar la continuidad y el progreso del Sporting con garantías. En esta línea, numerosas han sido esta temporada las iniciativas para fomentar la asistencia de aficionados a los partidos jugados en Maó -promociones para abonados, entradas a menor precio que en taquilla, varias jornadas de puertas abiertas o jugar los sábados en lugar de los domingos como es habitual-, sin obtener la respuesta esperada.

A pesar de todas estas circunstancias, el club trabaja a marchas forzadas para conseguir recursos suficientes y saldar estos y otros compromisos adquiridos antes del próximo 30 de junio.

Diario de Menorca