Dani Mori vuelve a casa. El actual entrenador del Ferreries regresa este fin de semana a Santa Eulària para enfrentarse a una Peña Deportiva a la que condujo al ascenso a Segunda División B en la temporada 2007-08. El técnico, además, vuelve siendo una gran amenaza para los intereses peñistas después de haber sido capaz de reactivar a un cuadro menorquín que acumula nueve jornadas consecutivas invicto. El asturiano ha cumplido 14 partidos con el conjunto ‘ferrerienc’, del que se hizo cargo estando en zona de descenso con apenas cinco puntos en su haber, y ha hecho olvidar la dinámica negativa del comienzo de curso.

-¿Es especial para usted volver a Santa Eulària?

-Sí, claro. Siempre lo es cuando vuelves a un sitio en el que estuviste a gusto. Guardo grandes recuerdos, ya no sólo por el ascenso, sino por cómo fue la temporada, la unión del vestuario y la relación entre todos los componentes de la plantilla.

-¿Le habría gustado continuar entonces en la Peña?

-La Peña siempre me gustó. Lo que pasa es que hubo un poco de revolución en el club cuando se ascendió. Cambió de presidente y a mí me llamó el Mallorca. Soy un profesional y me habría gustado seguir en Santa Eulària, pero se complicaron las cosas. Todo se retrasó mucho. Tardaron en llamarme y, cuando me propusieron continuar, ya lo tenía prácticamente hecho con el Mallorca. No pudo ser. Me marché por decisión propia.

-¿Queda lejos ya el salto a Segunda B con el conjunto peñista?

-No. Es algo que lo tienes presente. Fue un logro histórico para la entidad y todos nos quedamos con grandes recuerdos que todavía están latentes. Somos conscientes de lo que hicimos y hay que valorarlo en su justa medida.

-De luchar por el ascenso y conseguirlo con la Peña pasa a pelear por la permanencia con el Ferreries. Y va camino de lograrla.

-Sí. Son etapas diferentes, pero con el mismo fin: cumplir los objetivos. Cuando fui a Santa Eulària, el equipo venía de haber quedado octavo y la meta era intentar jugar el ‘play off’, pero acabamos incluso subiendo. Se cumplieron los objetivos con creces. Yo no tenía intención de entrenar este año. Aguanté hasta el final en el mercado de Segunda B y el camino me trajo finalmente a Menorca. La interesante propuesta del Ferreries me convenció y estoy muy contento por ello. Se cogió al equipo alejado de la zona de salvación y en una dinámica bastante negativa internamente, pero, ahora, estamos más o menos bien, en racha. No nos podemos confiar porque la Liga es larga. Hay que mantenerse firme y seguir ganando partidos.

-¿Cuánto mérito tiene el entrenador en la reacción que ha protagonizado el Ferreries?

-Yo soy uno más. Soy la persona que debe decidir sobre el grupo y proponer cosas. Lo importante es que los futbolistas crean en ti. Eso es lo más complicado. A partir de ahí, comienza el trabajo del futbolista. Yo creo que tengo tanto mérito y demérito como los jugadores. No creo que los entrenadores debamos ser protagonistas, porque lo son los futbolistas. El que opine lo contrario está equivocado.

-¿Ve posible ganar a la Peña?

-Veo posible ganar a cualquier rival de nuestra categoría. Ahora mismo, mi equipo está preparado para eso, pero también pienso que podemos perder contra el último si bajamos la intensidad. Santa Eulària no es uno de los campos más fáciles, pero si no tuviéramos posibilidades, no iríamos.

-¿Como se ve desde fuera que el equipo peñista este fuera del ‘play off’?

-Ahí no puedo entrar. Yo aprecio a la Peña y creo que debemos seguir nuestro camino y no valorar eso.

-¿Le gustaría regresar a este club?

-Si se da un proyecto interesante, no tiene entrenador y yo no tengo equipo. ¿por qué no? Soy un profesional y vivo del fútbol. Jamás me cerraría una puerta, y menos la de la Peña, para el futuro, pero quiero dejar muy claro que ahora mismo estoy contento en el Ferreries y es al que debo todo mi trabajo y profesionalidad para lograr el objetivo.

Ultima Hora Ibiza