Gonzalo Castro no se vende. Los responsables del Real Mallorca le han colgado al uruguayo el cartel de intransferible porque consideran su concurso imprescindible para no pasar apuros la próxima temporada. El uruguayo alineará en el centro del campo con Pep Lluís Martí, Jonathan De Guzmán y Emilio Nsue para formar una línea medular titular de garantías. Castro, que cumplirá su cuarta temporada en la disciplina bermellona, será uno de los pilares de la plantilla y solo abandonará el club salvo que llegue por él una oferta mareante.

El propio Castro se puso en el escaparate pocos días después de que arrancara la pretemporada. «Tras haber hecho una gran temporada uno no puede sacarse de la cabeza plantearse ir a más. Mi representante vendrá a Mallorca en una o dos semanas y me pondrá al tanto de mi situación. Pero aún no me han dicho nada, así que me centraré en pelear por un puesto aquí», dijo. «Uno trata de proponerse metas y dar un paso adelante, tanto a nivel futbolístico como económico. Si hay ofertas que sean para mejorar las tendré en cuenta. Y si me toca quedarme, también estaré muy contento», añadió Castro.

Desde entonces el uruguayo no ha vuelto a pronunciarse públicamente sobre su futuro, pero parece que su presencia a partir del 30 de agosto está asegurada. Castro exhibió su mejor versión la pasada campaña después de dos años en los que sembró muchas dudas. El uruguayo brilló en la banda izquierda y justificó en parte los cuatro millones de euros que costó su fichaje –por el 75 por ciento de sus derechos–?después de haberse adaptado al fútbol español y liberado al fin de la pesada competencia de Juan Arango.

El cuerpo técnico cree que con la presencia del uruguayo y de Tuni, quien está en la fase final de la recuperación de su grave lesión, la banda izquierda está más que cubierta.

Llorenç Serra Ferrer no quiere ni oír hablar de traspasar a un futbolista que ha demostrado un enorme potencial para marcar goles y dibujar asistencias desde la línea de banda. El responsable deportivo está convencido de que el técnico danés Michael Laudrup puede exprimir el talento del uruguayo al menos una temporada más.

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