Alineaciones:

RCD Mallorca: Leo Román; Maffeo, Valjent, Raíllo, Mojica; Samu Costa, Morlanes (Torre, 87′), Domenech (A. Sánchez, 58′), Darder (Llabrés, 87′), Asano (Mateu Jaume, 68′), Muriqi (Mateo Joseph, 68′).

Deportivo Alavés: Sivera; Jonny (Calebe, 82′), Tenaglia, Pacheco, Víctor Parada (Youssef, 64′), Blanco, Carlos Vicente, Ibáñez (Toni Martínez, 64′), Aleñá (Denis Suárez, 82′), Rebbach, Boyé (Mariano, 64′).

Gol: 1-0 Takuma Asano(37′).

Árbitro: Adrián Cordero Vega asistido en bandas por

Tarjetas: Amarillas a los locales Maffeo(27′) y Samu Costa(47′) y alos visitantes Jonny Otto(22′), Víctor Parada(33′) y Youssef Lekhedim(93′) por el Alavés.

Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 7 de LaLiga EA Sports disputado en el Estadio Mallorca Son Moix ante 16.275 espectadores.

Comentario:

El Mallorca suma de tres por primera vez en lo que va de temporada ante el Alavés y abandona la cola de la clasificación, dejando atrás a Girona y Oviedo, uniéndose al club de los cinco puntos formado por Rayo, Celta, Levante y Real Sociedad.
El partido pudo resultar interesante para los que disponíamos del guión establecido por el autor e incluso las acotaciones del propio guión.
Tal como explicó Arrasate, se trataba de iniciar la vuelta a la competición partiendo de la casilla de salida, dejando de lado lo ocurrido hasta ahora y poner la primera piedra para volver a ser reconocibles. Lo más importante se consiguió sumando tres puntos, alcanzando a los equipos fuera de posiciones de descenso, dejando la portería a cero. Todo ello para recuperar la confianza y volver al juego brillante disfrutado la pasada temporada. La responsabilidad que todo esto conllevaba fue a costa de una primera parte absolutamente aburrida. Los espectaculares neutrales que lo sufrieron por televisión (sin guión), dudo mucho que no cambiarán de canal en el descanso. Los del guión en mano, en el Estadio podíamos entender las constantes impresiones, aún así parte de la grada se empezaba a inquietar cuando llegó el 1-0 marcado por Asano, aprovechando el buen apoyo que encontró en Marc Domenech, callando el primer conato de posibles silbidos.
La segunda parte cambió ligeramente, el gol soltó piernas y se convirtió en colchón para manejar el exceso de responsabilidad, era mucho lo que hoy se jugaba. Lejos de dar un paso atrás para amarrar lo obtenido, fue con el marcador a favor cuando mejor se jugó y más se dominó al Alavés, manteniendo el dibujo con cuatro atrás y buscando el segundo gol que, en toda la segunda parte, estuvo más cerca que el posible empate de los de Vitoria. La oportunidad más clara la tuvo Mateu Morey, pero su disparo lo sacó Pacheco con el portero Sivera ya batido. Un equipo, el visitante, que dominó durante la primera parte sin saber aprovechar la ansiedad con la que comenzó el Mallorca y le dejó crecer. Realmente los «babazorros» hicieron honor al nombre que les vio nacer hace ya más de un siglo «Sport Friend’s Club.

Toni Ferrer para Fútbol Balear.