El domingo a las 12 horas en Sant Bartomeu se producirá un derbi inédito. Se trata del CE Ferreries – CD Menorca, que se enfrentarán por vez primera en la Liga Nacional juvenil. Ambos equipos llegan a la segunda jornada de la temporada después de haber perdido el primer partido del curso.

Pero la imagen curiosa estará en los banquillos. Y es que en ellos habrá dos viejos conocidos que se enfrentarán por primera vez como entrenadores. Lluís Vidal, preparador del CD Menorca, tuvo a sus órdenes en el Sporting Mahonés a Juan Romero, míster del ‘Ferre’, durante seis temporadas.

La fotografía que ilustra esta información corresponde al año 2002. Concretamente, al día en que se presentaba a Vidal como nuevo técnico del primer equipo sportinguista. Para Romero no hacía falta ninguna presentación, ya que había coincidido con el técnico desde la categoría infantil. “He pasado con él la mitad de mi carrera como futbolista”, cuenta el ahora preparador azulgrana.

“Hace quince años, ni se me hubiera pasado por la cabeza encontrarnos así”, admite Romero, que añade que el del próximo domingo será para él “un partido especial y un motivo de alegría”. Vidal se lo toma con filosofía y remarca que este cruce de caminos “es señal de que nos vamos haciendo mayores”. El técnico del club mahonés reconoce que siente por su ex pupilo “un aprecio muy grande”. También se mostró “orgulloso” por ver a su amigo progresando en su carrera como entrenador.

Vidal recuerda a su próximo rival como un jugador técnico y con un buen manejo del balón. Romero destaca de su ahora colega su profesionalidad. “De él aprendí que, si te tomas el fútbol en serio, los resultados llegan”, rememora.

En cuanto al choque del próximo domingo, ambos coinciden en que aún es pronto y el resultado no será determinante en la temporada. “Es un partido más para seguir aprendiendo”, resume el míster del recién ascendido CD Menorca.

El azulgrana espera convertir Sant Bartomeu en una plaza fuerte, como en la temporada pasada. Vidal se espera que el ‘Ferre’ juegue “con mucha intensidad, presionando mucho y utilizando los cambios de orientación y los balones en largo”. En otras palabras, un partido “difícil”. Romero cree que derbis como el del domingo “impulsan al fútbol menorquín y son bonitos para los jugadores, los entrenadores y el público”.

Diario de Menorca