La plantilla, hastiada ante los reiterados impagos, se reúne con el presidente y amenaza con disputar ante el Mercadal su último partido.

No es un episodio nuevo, pero puede que sea el último. La plantilla del Atlètic Ciutadella ha dicho basta. Una representación del vestuario se reunió ayer con el presidente Bep Oleo para exigirle que el club salde sus deudas con los jugadores, además de solventar la situación límite por la que atraviesan algunos de los foráneos. El dirigente citó anoche a su junta directiva ante la amenaza de los futbolistas de no presentarse al entrenamiento, algo que no harán desde hoy ni Xavi Molina, ni Javi Moreno, que han decidido abandonar el club.

La intención de los jugadores del Atlètic es la de esperar a conocer el contenido de la reunión de los gestores de la entidad antes de adoptar alguna medida, a pesar de que no son optimistas. Las reiteradas promesas incumplidas de los ejecutivos del Atlètic han generado una desilusión enorme en el vestuario, que empieza a estar harto. En la tarde de ayer varios futbolistas se personaron en el lugar de trabajo de Bep Oleo para exponerle la situación en la que se encuentran. El presidente les pidió una horas para solucionar los problemas y saldar sus deudas, pero es muy probable que muchos de los integrantes del equipo jueguen el domingo su último partido.

La plantilla meditó la posibilidad de no acudir al entrenamiento previsto para la tarde de ayer, pero finalmente decidió asistir tras hablar con el máximo mandatario. Con todo, Xavi Molina y Javi Moreno ya se han despedido de sus compañeros y hoy mismo tienen previsto regresar a Barcelona. Los dos jugadores llegaron el pasado mes de enero procedentes del Palau de Plegamans y del Marinao de Sant Boi, respectivamente, pero la falta de liquidez del Atlètic Ciutadella les ha obligado a dejar el equipo.

La situación que atraviesan los jugadores de la Isla -no han percibido ninguna mensualidad- es difícil, pero no tanto como la de los futbolistas catalanes o brasileños. Ayer varios de ellos trataron de ponerse en contacto con Xavi Ogazón, director deportivo del club, pero ninguno obtuvo respuesta. La plantilla podría emitir hoy un comunicado denunciando la situación del club si los directivos no les ofrecen soluciones. Con todo, es muy probable que la plantilla se acabe desintegrando después de la cita del domingo ante el Mercadal, ya que muchos de los jugadores están esperando poder reunir el dinero suficiente para volver a su lugar de origen. Una situación lamentable que está manchando la imagen de una entidad histórica.

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